14 ENERO 2021

La pandemia no fue obstáculo para que se generarán logros y cambios que igual son logros.

Nuestro espacio de trabajo hoy dia tiene una nueva imagen y fueron pocos los productos que cosechamos, pero dejamos muchas semillas y terminados que este año nos darán resultados. Cuidamos con especial cariño nuestros arboles frutales, tenemos un rábano, algunas cebollas, muchos ajos !!!! Y terminamos semillas especiales, guayabos y  contamos con muchos brotes de patatas y tomates!

Nuestro objetivo de reutilizar los elementos y recursos se cumplió. Tenemos una casita de terminados y bancales de siembra muy bellos, contamos con dos cajas de Composta, y atacamos todas las áreas de jardinería, con una inversión mínima. 

Nos quedamos con ganas de tener semillas nuevas y plantones, pero esto en lugar de generarnos decepciones nos impulso a buscar alternativas.

Aprendimos a germinar semillas que por común se tiran a la basura.

Contamos con maderas nuevas con las que construimos bancales, pero todo lo demás fue enteramente recuperado, reutilizado y reciclado. 

Y lo mejor de todo fue el final de las “judías Verdes” que terminaron en el hogar y mesa de una de las compañeras.

A la par de la actividad en el huerto desarrollamos actividades combinando disciplinas del centro de arte, el debate tanto de acontecimientos, noticias e inquietudes no se extrañaron. Esto complemento de singular manera la actividad en el huerto y la hizo dinámica. Estamos convencidos que este pequeño terreno tiene la capacidad de generar productos que ayuden a los compañeros y apoyen  la economía   familiar.

Los compañeros agradecemos y reconocemos el apoyo, la compañía, la alegría y el amor con el que en cada sesión Cristina nos recibía. Cada puño de tierra de este espacio lo demuestra.